Amigo kili, para mí la mayor recompensa es recuperar el control. Vamos a ver ¿pero quién es ese cilindro blanco y asqueroso para OBLIGARME a bajar a la calle a comprar más cilindros un lunes a las doce de la noche? ¿Y quién es para provocarme esas toses y esa garganta permanentemente irritada, y para pringarme los dedos y hacerme oler como el tubo de escape de un autobús?
Nada, hombre: tu vida es TUYA, y dejando el tabaco has recuperado el control sobre ella. Las cosas ya te olerán mejor, la comida sabrá mejor, la garganta no te picará y los despertares habrán dejado de ser un "concierto para tos en do mayor". Merece la pena, compañero, y como dice Striker, si te pueden las ganas de fumar, entra en el foro, lee un libro, pinta un monigote o hazte dos flexiones, pero nunca, nunca, te vuelvas a poner a las órdenes del cilindro blanco. Para mí es ya un año y casi cuatro meses, y ha sido una de las mejores decisiones de mi vida.
__________________ ...lo intento, pero sigo sin tener ni idea...
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